TRUCHAS TROFEO DEL RÍO SEGRE

Todos soñamos con pescar una gran trucha, y no solo pescarla sino lograr atraparla en el salabre. Las grandes piezas viven en cantidades importantes en los grandes ríos, ya que estos disponen de las condiciones idóneas para albergar ejemplares de categoría de trofeo. Izaak Walton en su libro “El perfecto Pescador de Caña” nos asegura que los ríos de anchos, profundos y con importantes corrientes son los que esconden los mejores peces para ser pescados. Y así es en efecto el río Segre.

El Segre es el río truchero con más fama del Pirineo, y aunque ha sufrido muchas extracciones indebidas de caudal, constantes contaminaciones de sus aguas y finalmente la plaga del cormorán, aún es posible hacer buenas pescas con alguno ejemplares de ensueño. Así no es raro que pescando unos días en cualquier tramo donde existan corrientes profundas o anchos y largos pozos, podamos pescar algunas truchas de más de 50 cm. Con un poco de suerte, no es raro poder clavar algún gran ejemplar de 60 cm, 70 cm o incluso bastante más.

Una vieja resabiada del río Segre
Una vieja resabiada del río Segre

El Segre cuenta con un estupendo recorrido truchero de aproximadamente 80 km. Desde la localidad de Puigcerdà en la comarca de la Cerdanya, hasta el pueblecito de Alós de Balaguer en la comarca de la Noguera, es posible capturar con éxito truchas comunes y también ejemplares salvajes de trucha arcoíris, contando que si el lugar pescado y prospectado a conciencia es relevante, es posible clavar un ejemplar trofeo, como los que salen en los reportajes de pesca en tierras americanas.

Los mejores lugares donde practicar la pesca a mosca son innombrables. Por sectores, los más conocidos e interesantes son: en la Cerdanya, el sector Isóvol – Banys de Sant Vicenç, río abajo en la Seu d’Urgell, el sector Alàs – El Plà de Sant Tirs y finalmente el tramo más ancho del río, el de Ponts – Alós de Balaguer. Cualquier pescador a mosca que quiera pescar con éxito el Segre, es necesario que conozca estos tres grandes espacios fluviales emblemáticos.

Los dos primeros no están regulados por embalses y por lo tanto su pesca queda condicionada por el deshielo y la lluvia. Es especialmente productivo, pescarlos a partir de mediados de Junio hasta mediados de Octubre. El gran tramo final, la pesca de la trucha está permitida todo el año pero está sujeta a los desembalses de la gran presa de Rialp de reciente creación.

Los mejores épocas para pescar este último tramo son los meses de Octubre y Noviembre y después según el nivel del embalse, la primavera y el verano hasta finales de Julio. Estos datos son únicamente orientativos y pueden variar en función del caudal desembalsado por Rialp.

Pescando a ninfa en el sector de La Seu
Pescando a ninfa en el sector de La Seu

La época permitida para la pesca de la trucha es desde el 15 de Marzo hasta el 15 de Octubre en las aguas consideradas trucheras. En el tramo Ponts – Alós de Balaguer sus aguas son catalogadas de ciprinídos y la pesca de la trucha se permite practicar únicamente en la modalidad SIN MUERTE y está permitida todo el año. Todo el río Segre tiene amplias zonas acotadas Sin Muerte y con la mosca artificial como único cebo permitido. Las zonas libres son todas Sin Muerte y solo se autoriza, la mosca artificial y la cucharilla de un solo anzuelo.

Las truchas muestran especial interés todo el año con las ninfas y los strimeres. Estos últimos son muy útiles para pescar los ejemplares trofeo soñados. En primavera y en verano es posible divertirse pescando a mosca seca. El Segre acostumbra a obsequiarnos con buenos “serenos” y con numerosas picadas a lo largo de todo el día en las corrientes de poca profundidad . La mosca seca favorita del Segre es el tricóptero sin ninguna duda. La mosca del espino o Bibio Marci y por supuesto las efémeras y ephemerellas ignitas que con los dípteros negros, no podemos olvidar. Es importante destacar que el empleo de hilos finos y muy finos, no son aconsejables para pescar un río que cuenta con numerosas piezas de gran tamaño. En otras palabras, un hilo del 12% es un hilo verdaderamente delgado y fino para pescar el Segre, pero que no garantiza que soporte las carreras y los repentinos tirones, aparte de las hileras de dientes, de las grandes truchas del río. Es aconsejable pescar con un 14% o un 15% como hilo normal, pero si sospechamos que el pez que se está aposturado es grande, lo mejor es asegurarlo, atando un hilo del 16% o 18%, ya que de donde menos esperemos pueden picar truchas enormes que luego lamentaremos si las perdemos por pescar con un hilo demasiado fino.

Aguas abajo de la Seu, el Segre es un río formidable

Las truchas de la zona de la Seu d’Urgell son de una combatividad extraodinaria y aprovechan cualquier obstáculo para refugiarse y ponerse a salvo. Las arcoíris salvajes son lo mejor de todo. Actualmente están dispersas por cualquier lugar del río y son de muy difícil captura, de una extraodianaria resistencia y de un combate fuera de lo común. Es sumamente difícil llevar al salbre, un gran ejemplar salvaje de trucha arcoíris. El combate puede durar más de la cuenta y esta intentará jugar todas sus bazas y emplear cualquier sucia treta para zafarse del pescador. Es más puede que nunca consigamos acercarla lo suficiente para verla de cerca.

La pelea con una gran trucha común es otra cosa. Es una trucha que busca refugiarse en el fondo del río, con su gran resistencia, sus carreras alocadas y el continuo cabeceo en la profundidad de las aguas, siempre intentando soltarse del anzuelo. La trucha común también aprovecha refugiarse entre las hierbas acuáticas y enredando todo el hilo de pesca, para acabar rompiéndolo o simplemente agotando la oportunidad del pescador de su captura, ya que una vez esté entre la espesa hierba no habrá manera de sacarla de su nuevo refugio.

Una de las muchas truchas de buen tamaño del río Segre

El equipo más adecuado para pescar el Segre, son un par de cañas del número 4 o 5 y de longitudes entre 9 y 10 pies. Los carretes large arbour con frenos de disco son muy aconsejables. En cuanto a los waders, es conveniente utilizar vadeadores transpirables, acompañados de unos pantalones Polartec 200 o 300, para la zona controlada por el embalse de Rialp. Este año hay una novedad a tener en cuenta. En Catalunya están prohibidas las botas con suela de fieltro, siendo las suelas de plástico o goma son las únicas permitidas. El uso de un bastón de vadeo es casi imprescindible, para evitar caídas inoportunas y desagradables.

 

~  Carles V.

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